Castellón acusa las huelgas con el mayor atasco judicial de la Comunitat

Los datos hechos públicos ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que además son los primeros del 2023, evidencian que Castellón, con una justicia de por sí colapsada, está acusando especialmente las huelgas de letrados de la administración, de funcionarios y demás personal. 

Mientras que el número de asuntos ingresados en el primer trimestre del año ha descendido tanto en Valencia, como en Alicante, en Castellón se ha incrementado en un 14,5% respecto al mismo periodo del año anterior.

La combinación del alza de los pleitos con la falta de personal y los paros de los funcionarios del sector como protesta han llevado a la justicia provincial a una situación límite. Y es que los números no engañan: si Castellón empezó el año arrastrando 41.593 asuntos en trámite, el lastre que lleva es demasiado pesado. Aunque registró 20.720 casos nuevos y logró resolver 18.229, el saldo final al término del primer trimestre es de 43.520 causas pendientes --esto es, un 5% más que al acabar 2022--.

Nules, el peor parado

Si se analizan los datos por partidos judiciales, Nules, con una tasa de congestión de 4,67 se lleva la peor parte. Le siguen Segorbe, con 3,71; Vinaròs, con 3,57; Vila-real, con 2,85; y Castellón, con 2,65.

Por jurisdicciones, la de lo contencioso-administrativo, que se interpone cuando existe un conflicto entre un ciudadano y una administración pública, es la que más preocupa en la provincia. Y es que, si hace ahora un año tenía una tasa de congestión 4,10 y acabó 2002 con un 4,13, en solo tres meses se ha duplicado, pasando a nada más y nada menos que 8,09.

El resto de jurisdicciones también han ido a peor en cuanto a sobrecarga de trabajo. Social tiene ahora una tasa de 5,49; Civil, de 3,90; y Penal, de 2,69.

Los procuradores

El Colegio Oficial de Procuradores de Castellón, como publicó este diario hace unos días, tacha la situación de «indigna» y avisa de que algunos de sus profesionales ya se plantean cerrar sus despachos o pluriemplearse para hacer frente a la actual situación. Con respecto a las huelgas, insisten en que no es «aceptable» que ellos mismos y los letrados tengan que «peregrinar cada mañana por los juzgados», sin tener el conocimiento de si se va a celebrar o no la actuación planeada. «Esta situación ha afectado gravemente a la confianza en la justicia, pues los ciudadanos están sufriendo los retrasos para cobrar sus pensiones de alimentos o pensiones compensatorias y dejan de creer en un sistema que históricamente ya era lento», afirmó la decana, Carmen Rubio, en conversaciones con este diario.

Violencia de género en Vila-real

En otro orden de cosas, como también recogió Mediterráneo, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Vila-real, el primero que se comarcalizó en toda España --como experiencia piloto-- y que atiende a una población de 219.153 ciudadanos, se encuentra «totalmente desbordado» por la carga de trabajo que soporta. Tanto es así que, según datos del Consejo General del Poder Judicial, ya es el órgano especializado en violencia de género que más causas registra en toda la Comunitat (2.550 solo en el año 2022), por delante de los distintos juzgados de València y Alicante y también del juzgado de Castellón. Cabe recordar que este último, con 1.935 casos en el último año, también se encuentra al límite de sus capacidades y reclama la puesta en marcha de más juzgados.

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