Una sola obra dispara la inversión del Estado en Castellón

El 2022 fue un buen año para la licitación de obra pública en Castellón. Las diferentes administraciones sumaron 385,5 millones de euros, el doble que en el 2021. En aquella ocasión, la actuación que marcó la diferencia fue el acceso ferroviario sur a PortCastelló. La primera fase de esta infraestructura tuvo un coste de salida de 123 millones de euros. La dinámica se mantiene: los primeros meses del 2023 también suponen un fuerte incremento de la inversión en la provincia, y vuelven a tener como gran protagonista el acceso del puerto. En esta ocasión, con la segunda fase, que se licitó en mayo por 75,4 millones de euros.

Balance del comienzo de este 2023

En conjunto, el importe de las obras públicas programadas en los cinco primeros meses de este 2023 ascienden a 165,8 millones de euros. Esto supone prácticamente triplicar la cifra de 59,3 millones en el mismo periodo del 2022. Así queda de manifiesto en la recopilación que periódicamente realiza la patronal de las grandes constructoras y concesionarias de infraestructuras, Seopan.

Furor por ejecutar el segundo tramo del acceso sur a PortCastelló: casi una veintena de ofertas

La administración que más dinero destina es la estatal, con 78,6 millones. Prácticamente todo este dinero se concentra en la obra ferroviaria, con 75,3 millones. 

Corredor mediterráneo

A esta actividad se tiene que relacionar la obra del corredor mediterráneo. Los diferentes tramos que se ejecutan en estos momentos en Castellón suman unos 500 millones de inversión, a los que se deberá sumar la segunda plataforma de alta velocidad entre València y Castelló, y que debería pasar a estudio de impacto ambiental en un breve plazo de tiempo.

Una inversión descomunal: esto cuestan los tramos del corredor mediterráneo que pasan por Castellón

La administración local, que aúna tanto a los ayuntamientos como a la Diputación, suma 70,8 millones de inversiones, especialmente en los meses de abril, con inversiones por 23 millones; y mayo, con 24. En el mismo periodo del 2022 las inversiones eran de 29,9 millones. Menos de la mitad.

En cambio, la Generalitat se queda más rezagada en este apartado, con 16,5 millones. Es la única institución pública que pierde impulso inversor respecto al pasado año, cuando se destinaron 27,5 millones en el ciclo analizado.

Costes

Además de estas diferencias, hay que tener en cuenta el gran problema perjudicó a las licitaciones en el pasado año. El crecimiento de los costes de las materias primas hizo que 114 obras públicas quedaran desiertas, debido a la falta de empresas interesadas en hacer las obras o por el abandono de las que habían resultado elegidas. Este año, las incidencias han quedado reducidas en gran medida, ya que los nuevos procedimientos puestos en marcha por las administraciones ya han actualizado los costes de los diferentes materiales, al tiempo que se ha conseguido estabilizar la escalada de costes de la construcción.

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