La Conselleria redoblará la vigilancia para evitar que la naranja de Egipto que llega a Castellón se reetiquete como valenciana

La Conselleria de Agricultura reforzará el plan de control oficial de la cadena agroalimentaria de la Comunitat Valenciana para evitar que la naranja que varias empresas de Castellón están importando de Egipto se reetiquete y se venda como si fuera fruta valenciana. Así lo ha anunciado este martes el conseller de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Luis Aguirre, que ha mostrado su apoyo al sector citrícola valenciano, que se encuentra en plena campaña, y ha señalado que desde su departamento se está dando seguimiento a las importaciones de naranjas procedentes tanto de Egipto como de otros países terceros.

La decisión de empresas de Castellón de traer naranja barata de Egipto en plena campaña local, desvelada hace unos días por Mediterráneo, ha encendido las alarmas de los productores que temen que la llegada de fruta foránea presione a la baja los precios en el campo. De hecho, la Unió Llauradora anunció nada más conocerse el desembarco en el puerto de Castellón de cerca de 3.000 toneladas de naranja procedente de Alejandría que reclamaría tanto al Ministerio como a la Conselleria un incremento de los controles para evitar el reetiquetado y la entrada de fruta con plagas o restos de pesticidas prohibidos. Ahora la Conselleria ha recogido el guante y anuncia más inspecciones en los almacenes.

Además, desde el departamento que dirige José Luis Aguirre han avanzado que reclamarán al Ministerio el refuerzo de las inspecciones a las importaciones con el objetivo de vigilar el cumplimiento estricto de la legislación vigente en lo relativo a plagas y residuos fitosanitarios. "Somos defensores de los citricultores de nuestra Comunitat, por lo que, además de monitorizar esta entrada de mercancía, reiteramos nuestra petición al Ministerio del refuerzo de las inspecciones a las importaciones, por la importancia de disminuir los casos de alertas relacionadas con residuos de plaguicidas prohibidos o de plagas invasoras en los productos agroalimentarios importados”, ha afirmado el conseller.

Reciprocidad

Aguirre ha señalado asimismo que “una de las principales líneas de este gobierno se centra, precisamente, en la exigencia de una reciprocidad frente a terceros países y adelanta que insistirá en que la Unión Europea defienda los intereses de los productores locales”. En este sentido, ha recordado que “las diferentes condiciones laborales, la disparidad de criterios a la hora de autorizar y aplicar determinados productos fitosanitarios, o las exigencias que se nos imponen en temas medioambientales y de seguridad alimentaria no son las mismas para nosotros que para países terceros” y ha destacado que “además supone un enorme riesgo de entrada de plagas y enfermedades que pondrían poner en jaque nuestra agricultura”.

 Sobre este asunto, el conseller ha hecho hincapié en las continuas interceptaciones de mancha negra procedente de Sudáfrica, y precisamente también desde Egipto, así como la reciente detección de falsa polilla en granadas procedentes de Marruecos.