Cierran de forma provisional el acceso norte a la N-340 en Benicàssim

Aseguran la entrada a la carretera tras los desprendimientos de rocas por las lluvias

Solo se puede usar, de momento, para ir hacia Orpesa o para entrar al pueblo de Benicàssim desde la N-340.

Solo se puede usar, de momento, para ir hacia Orpesa o para entrar al pueblo de Benicàssim desde la N-340. / Eva Bellido

El acceso norte a la N-340 desde el casco urbano de Benicàssim hacia Castelló permanece cerrado de forma provisional por unas obras de seguridad vial. Este se decidió cortar al tráfico a raíz de los desprendimientos de grandes rocas que se produjeron durante el último episodio de lluvias torrenciales que inundaron la localidad.

Debido a estos acontecimientos, el Ayuntamiento optó por limitar a un solo carril de paso el estrecho vial, que transcurre debajo de un puente, y que sirve de conexión con la carretera nacional.

«El peligro de que pudieran suceder otros desprendimientos existe y, por este motivo, se realizan los trabajos necesarios para asegurar la zona», explica el concejal de Urbanismo y Movilidad, Carlos Díaz. La actuación consiste, detalla el edil del área, «en la creación de una barrera con elementos de hormigón en paralelo al muro para evitar que las piedras caigan sobre la calzada».

Con la intervención, el tramo de vía de circulación se queda en un 75% de ancho y en uno de los dos carriles no se puede utilizar. Así, en la actualidad, el ramal solo está abierto bien para entrar al municipio desde la N-340 o para acceder a esta carretera destino Orpesa-Barcelona, por lo que permanece cerrado en sentido Castelló.

De forma provisional, los conductores deberán acceder a esta carretera desde otros puntos, como la rotonda de la Llave o más hacia el sur, desde la parte de las urbanizaciones de montaña.

Muro

Este cierre provisional de uno de los sentidos del carril se extenderá en el tiempo, ya que además se deberán desarrollar unas obras para reponer el muro, afectado por las fuertes inundaciones de finales de mayo, para evitar que pueda haber más desprendimientos, tal como indica Díaz.

«Estas obras entendemos que le corresponden al propietario de la finca, a quien se le requiere para que las ejecute y de no ser así, de manera subsidiaria, lo realizará el Ayuntamiento, pasándole después los cargos correspondientes», añade el propio concejal.

Las lluvias torrenciales de la madrugada del 26 de mayo causaron numerosos incidentes, como el cierre de varias calles al tráfico, inundaciones de locales y bajos, y la suspensión de las clases.