Poner en valor el patrimonio

Castelló tiene un patrimonio incalculable en sus ermitas. El catálogo del patrimonio es muy extenso y desde el Ayuntamiento se trabaja por mantenerlo, ponerlo en valor y darle el uso más adecuado. Pero sin duda alguna, las ermitas, entre las que destaca la Basílica, son un referente cultural.

La más antigua es Sant Jaume de Fadrell, donde tenemos algunas de las referencias históricas más antiguas de la ciudad, destacando el Salón Gótico, el retablo de Pere Pertús y todo el conjunto artístico. Siguiendo el antiguo camino romano nos encontramos con San José y San Isidro. Y también con Sant Roc de Canet, tradicional parada en la pujada de la Magdalena y bien custodiada por la colla Pixavi, al igual que Els Cavallers lo hacen con Sant Francesc de la Font.

Y si hay una ermita que aúna todos los sentimientos castelloneros es la Magdalena, referente de nuestras fiestas y del origen de nuestra ciudad. No podemos olvidar la ermita del Carmen, última de las incorporaciones al patrimonio municipal, así como la ermita de San Nicolau, en el la calle Alloza. Y sí, por último recordar que la patrona de la ciudad se aloja en un templo municipal: un lugar de encuentro, de paseo y recogimiento.

Espacios para disfrutarlos

Desde la concejalía de Ermitas nos marcamos un objetivo: dar a conocer y utilizar estos espacios para organizar actividades, conciertos, visitas, ciclos de rutas gastronómicas, etc. y lograr que, más allá de sus tradicionales celebraciones, fueran espacios puestos en valor y, sobre todo, disfrutados. Así lo hemos hecho con los ciclos: Font de Clàssics, Citrics, Escape Room en la ermita, o el que estamos teniendo en la actualidad con Nadal a les Ermites, con visitas temáticas o con los populares Paseos a las ermitas.

Animo a la ciudadanía a disfrutar de estos espacios, a conocerlos y a valorarlos como parte del patrimonio histórico y artístico de Castelló.

Concejala de Ermitas en Castellón

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