Punto de vista

La muerte es una parte de la vida

Joaquín Serrano

Joaquín Serrano

La muerte es parte de la vida, de hecho es su fin. Todos moriremos. El temor que nos inspira es un obstáculo para ser feliz. Cuando nos morimos, ya no importa, pero el miedo a su llegada, al sufrimiento que a menudo la precede, al olvido, a la pérdida de la identidad y el dolor que causan en nuestros seres queridos, es lo que más nos asusta. Todo tiene un principio y un final.

En cuanto aceptemos que es algo normal y que a todos nos llegará la hora, nuestra actitud cambiará. Es mejor aceptar que tenemos una enfermedad y empezar a tratarla, que decir que no pasa nada y engañarnos. La vida cambia sin cesar y las cosas dejan de existir, incluidos nosotros. Nuestro cuerpo está en continua evolución, como nuestra mente. Todo cambia, nada permanece estático ni es permanente. La vida es corta, así que tenemos que usar nuestros días sabiamente para disfrutarlos con alegría y que el mundo sea un sitio mejor para todos. La opción positiva de enfrentar la propia mortalidad es hacerlo con alegría, sin miedo, sin remordimientos.

La clave es nuestra perspectiva y las acciones que se derivan de la misma. Si tu ser querido muere, la tristeza y la pena son respuestas naturales pero si mantenemos el foco de atención en la persona que hemos perdido, nos aliviará. Por el contrario, si nos centramos en nosotros mismos, el peligro de caer en la depresión aumentara.

La pena es un recordatorio de lo profundo que es nuestro amor. Sin amor, no hay pena. Contemplar nuestra propia mortalidad nos ayuda a experimentar un sentido de perspectiva y de gratitud. Es el recordatorio último de la no permanencia y de lo efímero de la vida. No debemos malgastar ningún día, cada momento es importante.

*Notario y doctor en Derecho

Suscríbete para seguir leyendo