BABOR Y ESTRIBOR

Digan la verdad

Basilio Trilles

Basilio Trilles

Papá Noel tuvo el acierto de traerme el libro de Antonio Caño, Digan la verdad, en el que narra las vivencias del periodista a lo largo de 40 años. Caño fue el primer reportero español en llegar al lugar de El Salvador donde fueron asesinados Ignacio Ellakuria y otros cinco sacerdotes, en 1979, cuando el periodismo era a cara descubierta y mordiendo polvo. Tras décadas entregado a informar por medio mundo, cubriendo guerras y sorteando dictadores, Caño llegó a dirigir El País en momentos difíciles para el PSOE de Rubalcaba, al que apoyó. Aconsejo la lectura del testimonio a colegas de buena voluntad, víctimas de embriaguez partidista capaz de nublar la consciencia, visionarios quijotescos de una Brunete mediática atribuida a la derecha y señalada como ariete de una conspiración contra el presidente Sánchez. Curioso fenómeno para el análisis psiquiátrico, en la actual España del sanchismo.

Uno tiene experiencia de cómo las gastan ciertos caciques de la política, por eso entiendo a Caño cuando, remontándose a las elecciones de junio del 2016, afirma: «Fue en ese momento cuando descubrimos sin atisbo de duda que Sánchez estaba dispuesto a cualquier cosa con tal de conservar el poder». Consumada la moción de censura que desalojó al PP del Gobierno, el 1 de junio del 2018, el entonces director de El País se refiere al clima de aquel día en la redacción: «No importa cómo, con quién ni para qué; todo eso es accesorio. Lo importante es que la izquierda volvía al poder y eso solo era motivo de regocijo». Tres días después Caño publicó un artículo crítico con Sánchez: Hay un camino a la izquierda.

El presidente pidió la cabeza del periodista, ese mismo día fue cesado junto a su equipo. Libertad, dicen.

Periodista y escritor