Cumplir la palabra

Cumplir la palabra es una de las máximas que existen en política. Hay más, por supuesto: trabajar y tener vocación de servicio público, ser honesto y transparente en la gestión, velar por el interés general, gobernar para todos… muchas son las aristas que giran en torno a la función de ser un servidor público y estar al frente de una institución, pero desde luego, cumplir la palabra es sagrado.

Y eso estamos haciendo este gobierno, desde que llegamos a la alcaldía de Castellón. Nos comprometimos a devolver la libertad a los castellonenses para que pudieran elegir cómo llamar a su ciudad, tanto si querían en valenciano como en su forma castellana, y activamos el expediente para conseguirlo en los próximos meses. Prometimos que bajaríamos los impuestos, y hemos activado en los presupuestos de este año 2024 una bajada de la presión fiscal que se acerca a los 3,6 millones de euros, para que las familias tengan más recursos para llegar a final de mes. También dijimos que incrementaríamos el esfuerzo presupuestario para que se reforzaran las labores de limpieza de calles y plazas y mejorara la imagen de Castellón, y por eso hemos puesto a más personal para el baldeo y barrido de las vías públicas o hemos multiplicado la programación cultural, lúdica, festiva y de ocio para que Castellón vuelva a ser una ciudad viva.

Cambiar las cosas

Son solo cuatro ejemplos que demuestran que la palabra que dimos durante la campaña electoral es cierta, que hemos venido a cambiar las cosas, a trabajar por los castellonenses, a hacer las cosas de otra manera… y lo estamos haciendo. La lista es grande. Y lo estamos haciendo con mucha cabeza, pero también con corazón. Mucho corazón. El rediseño de la zona de bajas emisiones para evitar que no se pierdan los fondos europeos pero que tampoco conlleve la prohibición total del acceso de vehículos al centro, la puesta en marcha de la comisión de trabajo para la remodelación del Mercado Central, la activación de los contactos para poner en marcha un nuevo convenio con el CD Castellón que permita mejorar las condiciones de las instalaciones y de las ventajas para el club...

En nuestra capital son muchas las cosas que reclaman mejoras. Y a todas ellas vamos a intentar llegar, aunque no siempre sea fácil la solución.

Cámaras del centro

Una de ellas ha sido el cese de las multas por parte de las videocámaras del centro. El polémico sistema de control de acceso de vehículos al casco histórico de nuestra ciudad fue una iniciativa puesta en marcha por el PSOE, Compromís y Podemos a la que siempre nos opusimos. Desde el primer día. Y lo hicimos porque nos pareció desde el minuto cero uno que solo iba a servir para freír a multas a los castellonenses y acabar de expulsar a los castellonenses del uso y disfrute de los comercios y negocios de hostelería del centro. Hasta 5.000 multas al mes ponían esas videocámaras, que este gobierno municipal desconectó, tal y como prometimos, el pasado 22 de diciembre. Nos comprometimos y lo hemos hecho. Cero multas en el primer mes de apagado del sistema, sin que ello tampoco haya supuesto un descontrol en el acceso de coches al centro. Se ha demostrado que era posible.

Y lo mismo vamos a hacer con la Marjalería. Esta misma semana trasladaba a sus representantes vecinales que este gobierno va a poner un plan estratégico que va a tener cuatro patas y que afectan de lleno a este espacio. Vamos a poner en marcha el plan de asfaltado de caminos por esta parte de la ciudad, puesto que lleva años sin recibir una inversión y las vías de comunicación de la zona no pueden esperar más. También nos comprometemos a asfaltar los dos caminos de las motas que van a cada margen del riu Sec. Vamos a poner en marcha el primer plan de limpieza de acequias por valor de 175.000 euros y, por último, vamos a contribuir a que se pueda reparar la tubería reventada que hace que se inunden las propiedades de los marjaleros que viven en la zona de Bovar, Senillar y Molinera. ¡Es de justicia!

Todo esto vamos a iniciar en estas primeras semanas del año 2024, junto a otras previstas, para demostrar que somos un gobierno que sabemos escuchar y hacer las cosas. Como siempre hemos hecho, como siempre haremos: con cabeza, pero sobre todo con mucho corazón. Y desde luego, cumpliendo con nuestra palabra.

Alcaldesa de Castellón