El Gobierno da 6 meses más a la macroplanta solar Magda para conseguir el ‘ok’ definitivo

La megaplanta solar Magda que la promotora Akuo prevé desarrollar en les Coves de Vinromà i Benlloc tendrá seis meses más conseguir el último permiso que le falta: la autorización de construcción. Este controvertido macroproyecto fotovoltaico es el único de Castellón que forma parte de los 18 de la Comunitat Valenciana que tramita el Ministerio para la Transición Ecológica y a los que el Gobierno acaba de dar una prórroga de seis meses  para que consigan dicha autorización. Con esa decisión, el Ejecutivo pretende salvarlos, ya que si no obtenían en menos de un mes (antes del 25 de julio) ese permiso, perderían el codiciado punto de conexión a la red eléctrica y tendrían que volver al inicio del largo proceso burocrático que dura unos cinco años.

La macroplanta solar Magda, que supondrá una inversión de 95 millones de euros, 258.622 paneles fotovoltaicos en les Coves y Benlloc y que prevé la ocupación de unas 250 hectáreas de suelo, obtuvo en febrero la declaración de impacto ambiental y a principios de junio la autorización administrativa previa. Pero para poder iniciar las obras le falta, además de las licencias de obra municipales, la autorización de construcción, un permiso que también concede el Ministerio y debía conseguir antes del 25 de julio. Ahora el Gobierno estima que el plazo es ajustado, dado que la promotora debía aportar tanto las modificaciones al proyecto como otras exigencias, con lo que le concede hasta enero del 2024 para que presente la documentación.

La decisión no afecta al resto de macroproyectos

El balón de oxígeno que Transición Ecológica ha dado a la planta Magda, no afecta, en cambio, al resto de megaplantas previstas en la provincia como, por ejemplo, las que prevé Enerhi en Cabanes y Vilafamés y en Les Useres y que todavía no cuentan con la declaración de impacto ambiental.

Además de Magda, en el conjunto de la Comunitat los proyectos salvados in extremis son 57, de los que 18 son macroplantas de más de 50 megavatios de potencia. Unas iniciativas que conllevan una inversión de 2.172 millones de euros y que suponen 2.715 megavatios, lo que significa doblar la capacidad actual de producción de energía verde del territorio valenciano. 

Otro de los argumentos esgrimidos por el departamento que preside Teresa Ribera para justificar la prórroga de seis meses es el atasco que existe en la cadena de suministro y en la falta de trabajadores para ejecutar las obras. 

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