Entierran en vida a un castellonense en un insólito ritual

‘’Me sirvió para fortalecer vínculos de amistad con la gente que me quiere"

Entierran en vida a un castellonense en un insólito ritual

Entierran en vida a un castellonense en un insólito ritual

Pese al gran avance de la humanidad y la multitud de recursos de inteligencia, ciencia y tecnología que se han incorporado con el paso de los siglos. Siguen habiendo un sinfín de preguntas sin respuestas, y muchas de ellas giran en torno a la muerte.

La mística que rodea al punto final de la vida ha sido responsable de muchísimas teorías, tradiciones y rituales. Y pese al paso del tiempo, nunca dejan de aparecer nuevas conductas de los seres humanos que tiene como objetivo final, la búsqueda de respuestas a esas preguntas que hasta el momento siguen siendo incontestables.

'Sienzenso', un funeral en vida

Una de las últimas modas que envuelve a la muerte llega desde Asia, concretamente desde Japón y Corea del Sur. Se trata del 'Sienzenso', un término que se traduce del japonés de forma literal como "funeral mientras estás vivo".

Y se basa en un ritual que está cogiendo fuerza en Asia y que se abre paso en algunos países de occidente. La práctica consiste en enterrar a una persona en vida mientras esta finge haber muerto y, por tanto, pese a estar totalmente inmóvil, el protagonista presencia la despedida que le hacen sus seres queridos.

Un vecino de Forcall, pionero

Víctor Amela, reconocido periodista con raíces castellonenses, ha sido uno de los pioneros en probar la experiencia de ser enterrado en vida.

El escritor, que es nacido en Cataluña, tiene un fuerte vínculo con el municipio castellonense de Forcall y presume con orgullo de ello.

Como profesional cuenta con una dilatada carrera en medios de comunicación y en la docencia, y explicó en el programa de televisión 'Horizonte', emitido en Cuatro, cómo fue su experiencia en este insólito ritual, y además explicó cuál fue el motivo que le llevó a realizarlo.

La experiencia y el porqué de su entierro

‘’En mi 62 aniversario me sometí a un funeral, a un ritual de enterramiento con un grupo de amigos muy queridos que me mimaron y me brindaron un maravilloso entierro que disfruté enormemente y resucité con ganas de seguir viviendo 40 años más’’, explicó Víctor.

Confesó que todo comenzó cuando, con 15 años, decidió jugar a la güija con un grupo de amigos y preguntó a qué edad moriría.

‘’Me arrepentí después. Ese vaso marcó 65. Posteriormente, cuando tenía 55, entrevistando a Alejandro Jodorowsky me vino el recuerdo de la güija y se lo conté y me dijo "Víctor, vas a morir a los 65 porque tu inconsciente va a intentar cumplir ese mandato’’. Esta sentencia dejó más descolocado aún al periodista.

Víctor Amela afirmó que fue Alejandro Jodorowsky, un artista, cineasta y escritor chileno, nacionalizado francés, quien le animó a llevar a cabo su funeral en vida: ‘’Morí, me tendí en el suelo, encargué a un carpintero que me construyera una caja de mi gusto, le puse una colchoneta agradable para estar cómodo y mis amigos me depositaron suavemente en el fondo de la caja […] Procuré que tuviera un respiradero’’.

Según indica Amela, el funeral fue lo más parecido a un entierro real, estuvo rodeado de sus amigos e incluso un sacerdote ofició la ceremonia.

‘’Cuando me tapan y ya me quedo a oscuras y empiezo a oír las paladas de tierra sobre la caja, durante un segundo me atravesó el pánico, pero entró y se fue. Empecé a gozar, a relajarme y a desear que durase más tiempo’’.

Afirma que se emocionó al escuchar las palabras y los llantos de sus amigos y recalca que sus amigos ‘’lo vivieron de verdad’’. Además, ha indicado que cuando salió de la caja ‘’fue muy feliz’’:

‘’Me sirvió para dejar de darle vueltas a la posibilidad de morir a los 65 años, para fortalecer vínculos de amistad con la gente que me quiere y a la que quiero y para dar ejemplo a uno de mis amigos y se anime un día a que también le enterremos a él’’, explica Víctor sobre lo que le aportó la experiencia.