No hay un rincón de Burriana en el que no se respire Fallas. La ciudad ha vivido este viernes una jornada muy animada marcada por el disparo de la primera mascletà de las fiestas josefinas de 2023, un acontecimiento al que se sumó numeroso público. Tras los nervios vividos el jueves por conocer los ganadores de los premios al mejor monumento, las comisiones salieron a la calle dispuestas a vivir intensamente cada minuto que quede hasta la cremà.
Por eso, el ir y venir de las charangas ha podido sentirse desde bien temprano ya que las entidades festivas tenían su tradicional cita en la sede social de la Caixa Rural. También ha dado comienzo la visita oficial a todos los monumentos, pero antes de marcharse a comer a las carpas y casals, las agrupaciones se organizaron para acudir ordenadamente hasta las inmediaciones de la plaza l’Hereu.
Allí, la pirotecnia local de Reyes Martí lo tenía todo preparado para hacer vibrar a los presentes con el estallido de fuego y color. Las reinas falleras, Silvia Navarro y Maria Olivas, junto a la corte de honor infantil, fueron las encargadas de dar la señal de aviso y, acto seguido, encender la mecha.
Además de las máximas representantes, también estuvieron presentes la alcaldesa, Maria Josep Safont; la concejala de Fallas, Sara Molina, junto al presidente de la Diputación, José Martí; la delegada del Consell en Castelló, Eva Redondo, y autoridades invitadas.
El sol y las agradables temperaturas fueron han sido la tónica dominante de la jornada, lo que, debido a la coincidencia con el comienzo del fin de semana, ha hecho que muchas familias salieran a disfrutar del buen ambiente y la gastronomía.
