Vinaròs tendrá una planta de trituración de restos vegetales

La Conselleria de Agricultura, dentro de las inversiones incluidas en la campaña de los presupuestos participativos para el consorcio de residuos C1, destinará 450.000 euros para crear una planta de trituración de restos vegetales en Vinaròs, municipio que dentro de este consorcio es el que produce más restos vegetales. La inversión incluirá la adecuación de la parcela y la construcción de la instalación, que deberá estar realizada antes del 30 de diciembre.

Respecto a su ubicación, la concejala de Obras y Servicios, Carmen Morellà, explica que los servicios técnicos municipales estudian la posibilidad de segregar una pequeña parte de la extensa finca de la calle Major. Fue adquirida bajo el gobierno del alcalde Jacinto Moliner (PP) para ubicar allí la ciudad deportiva, aunque finalmente no se hizo al resultar afectada por el trazado de la variante de la N-340. De no poder construirse en esta zona, buscarán otro posible emplazamiento en otros terrenos de la ciudad.

Esta planta de trituración permitirá gestionar de forma correcta los restos vegetales que se generan tanto de forma pública como privada, sobre todo durante los meses del verano. Así mismo, también permitirá al sector agrícola aprovechar este desecho como fertilizante para el campo.

El material vegetal generado en el municipio durante las operaciones de mantenimiento de jardines, especialmente la poda, supone un importante volumen que es necesario transportar a las instalaciones autorizadas por el Consorcio de Residuos con el correspondiente coste económico, y que el triturado de los restos vegetales es una operación ventajosa ya que reduce el volumen del residuo y se convierte posteriormente en un producto de valor añadido, además de llevar a cabo una actuación enmarcada en la línea de la economía circular, cerrándose el círculo con la vuelta del residuo al “proceso productivo”.

Trabajar conjuntamente con las plantas de Sant Mateu y la Salzadella

En este sentido, hay que destacar que la Conselleria de Agricultura, Desenvolupament Rural, Emergència Climàtica i Transició Ecològica, está llevando a cabo la transformación de las antiguas plantas de purines de Sant Mateu y la Salzadella, en plantas de agrocompostaje para aprovechar los restos vegetales y convertirlos en fertilizante orgánico para el campo.  "La idea es trabajar conjuntamente, de manera sinérgica, con las plantas de agrocompostaje de La Salzadella y Sant Mateu para poder elaborar un compost aprovechando estos restos vegetales", explicó Morellà. 

En cuanto a la planta prevista para Vinaròs, podrá ofrecer servicio en el territorio para mejorar la gestión de los biorresiduos de todo el Consorcio C1.