SU ARTÍFICE ES EL ARTISTA FALLERO DANI SALVADOR, DE MONTÁN

La falla de València que rinde homenaje a los pueblos de Castellón afectados por un grave incendio forestal

El monumento infantil de la falla Pérez Galdós-Calixto III, en València, está dedicado al fuego del Alto Mijares que hace un año arrasó 4.700 hectáreas

Así es la falla de València dedicada al incendio del Alto Mijares

Mediterráneo

De entre todas las fallas que serán este martes por la noche pasto de las llamas en València, hay una que en vez de tener un tono satírico como suele ser habitual, surge a modo de homenaje y tiene como protagonista la provincia de Castellón.

Concretamente el Alto Mijares, ya que el monumento infantil de la comisión de Pérez Galdós-Calixto III está dedicado este año al grave incendio forestal que afectó hace doce meses a buena parte de la comarca y calcinó 4.723 hectáreas.

Como contó Mediterráneo en noviembre, la explicación de que una falla de València recuerde este desastre ecológico se debe al creador del conjunto, el artista fallero Dani Salvador, que rinde homenaje al drama que vivieron todos los vecinos de su pueblo natal, Montán, y el resto de municipios de la comarca.

Contraste entre bosque quemado y verde

Bajo el lema Un descuit i el bosc s’esfuma, los elementos que componen la falla juegan con el contraste entre los bosques sanos y su importancia en el ecosistema, y los bosques quemados, tal como reflejan los dos tipos de suelo que sirven de base: uno árido tras haber sido arrasado por el fuego y otro verde y bucólico. Así, el personaje predominante es una llama con forma y cuerpo que quebranta la normalidad de un paisaje idílico.

Recuerdo a los municipios afectados

Además del mensaje en sí, los municipios implicados por el incendio también están retratados. Villanueva de Viver (lugar donde se originó el fuego), Montán, Fuente la Reina, Puebla de Arenoso o Montanejos son algunas de las localidades. Además, aparece un niño con la indumentaria típica de Montán (con el pañuelo rojo) que sopla a un árbol para intentar evitar que se propaguen las llamas.

Hay también dos niñas que están jugando con los pájaros que hay distribuidos por toda la falla, aunque el factor humano lo protagonizan los dos bomberos (uno equipado con una manguera y el otro tratando de hacer un cortafuegos), que simbolizan la lucha y el encomiable trabajo que realizaron los efectivos para apagar el fuego.

Los troncos que sujetan los nombres de las poblaciones afectadas y de los carteles informativos son «troncos reales que se quemaron en el incendio», cuenta el propio Salvador, del estudio Que Maten al Diseñador. 

Como novedad respecto a lo que había plasmado meses atrás en el boceto del diseño, el artista ha añadido un tronco más por la tragedia de Campanar, por lo que quiere que la falla sirva también a su vez como pequeño homenaje a las víctimas del incendio de València.