Magdalena

Esta es la portada del Especial de Magdalena para Mediterráneo

El pintor castellonense Carlos Sebastiá se inspira en sus recuerdos de las fiestas para crear una pieza llena de luz e iconografía propia

El redactor jefe Pepe Beltrán recepciona la obra de manos de Carlos Sebastiá.,

El redactor jefe Pepe Beltrán recepciona la obra de manos de Carlos Sebastiá., / Manolo Nebot

«En la portada del especial de las fiestas de la Magdalena, bajo el epígrafe de la luz, he querido plasmar la Magdalena de mis recuerdos». Son palabras del artista Carlos Sebastiá, encargado de ilustrar este 2024 el extra que, con motivo de la semana grande de Castelló, publicará el próximo viernes 1 de marzo el Periódico Mediterráneo.

Licenciado en Bellas Artes por la Universitat Politècnica de València y máster por la University of Arts de Londres, con una beca en Pekín (China), Sebastiá tiene un largo currículum desarrollado entre Castelló, València, Reino Unido, China, Portugal, Francia, EEUU, Austria e Islandia, con estancias, becas y exposiciones, y obra en numerosas colecciones.

El último año ha sido finalista en los premios Senyera de València, y ha estado becado por el Consorci de Museus de la Comunitat y por el Ajuntament de Castelló, premios que se materializarán en exposiciones este 2024, entre otras.

Sebastiá, con el redactor jefe Pepe Beltrán; y el jefe de Diseño, José Martos.

Sebastiá, con el redactor jefe Pepe Beltrán; y el jefe de Diseño, José Martos. / Manolo Nebot

-¿Qué ha querido contar a la ciudadanía con su obra de portada?  

-Mi trabajo, en los últimos años, investiga sobre la memoria y cómo percibimos esas imágenes. He trabajado mis recuerdos y mi memoria sobre las fiestas, sobre cómo las vivía más joven, con todas sus sutilezas y sensaciones, usando fotografías hiperpixeladas de recortes del periódico y pixeles de fotografía ampliados, con diferentes texturas e iconografía diversa. La obra me ha ido dando muchas sorpresas.

-¿Y el relato?

-Las fiestas de la Magdalena son un tema muy tratado y quería, en la línea de mi trabajo, darle otra perspectiva, uniendo la memoria a elementos de emoción asociados a esos recuerdos que quería destapar. Y ahí he buscado recursos que poco tiene que ver con las fiestas pero que crea relato a través de las formas y colores, con la luz que lo invade todo. ¿Qué era Magdalena para mí cuando era pequeño? Pues los amigos, la gente, la luz, las gaiatas, las mascletaes, la Romeria... que he querido plasmar con movimiento, con elementos que socialibilizan, que se relacionan entre sí, con las texturas y los colores verdosos.

-¿Y el resultado?

-Con un amplio banco de recursos con el que trabajar, he recuperado periódicos antiguos, e imaginería propia, readaptándolos en una primera capa que después ha ido por otros derroteros.

-Una portada abstracta que rompe con los cánones habituales...

-Eso me gusta. Estoy contento con la pieza, porque la abstracción tiene retos para darle una visión persona, pero sobre todo, un trabajo artístico, de investigación, de contexto, de significado. Y es una oportunidad para que cada persona que la vea construya su propia historia.

-Yo veo la riada de gente de la Romeria, los colores del Pregó, las cañas, las mascletaes, el terme...

-Esa es la intención, que cada persona que la vea genere su imagen a través de su propia memoria o sus propios recuerdos. Es lo importante, generar historias propias a través de la obra.

-Usted que ha vivido en Londres y en Pekín, ¿qué echaba entonces de menos de la Magdalena?

-Echaba de menos a mi gente, mi familia... y esos momentos de vivir las fiestas en la calle, de ir de un lado para el otro, y de estar en la millor terreta del món. Y el cerebro te lleva a veces a recuerdos que después te llevan a crear parte de una obra, o a una portada.