UNIVERSITAT

La UJI pone coto al abuso de la inteligencia artificial en las aulas

La Universitat lanza una guía al profesorado para detectar el fraude en los trabajos, con formación al profesorado y empieza a cambiar metodologías

El ChatGPT entra en las dinámicas de la educación superior en Castellón

Alumnos de la UJI, en la biblioteca del campus.

Alumnos de la UJI, en la biblioteca del campus. / Gabriel Utiel

La inteligencia artificial (IA) ha llegado para quedarse, de manera transversal, en todos los aspectos de la vida cotidiana. Desde su aparición, de la que ahora se cumple un año, ha irrumpido en el día a día, estando en boca de todos y popularizándose en multitud de ámbitos, de la industria al turismo, la sanidad, la agricultura y la sostenibilidad, y, sobre todo, en la educación. La aplicación de esta IA avanza a pasos agigantados en Castellón, permitiendo, por un lado, al alumnado trampear; y, por el otro, obligando al profesorado a cambiar metodologías y a mantener el ojo avizor para evitar el 'copia-pega' en trabajos o bien el uso abusivo de esta tecnología. 

Un manual en continua evolución

Los institutos empiezan a adaptarse a su uso como herramienta de aprendizaje, apelando a la responsabilidad, tal y como publicó Mediterráneo, y en la UJI ya han tomado cartas en el asunto y empiezan a poner coto, con la publicación de una 'Guía ChatGPT; qué es, para qué sirve y qué consecuencias tiene para la docencia', que se ha distribuido «a todo el profesorado y personal técnico». Un manual elaborado por el Centro de Educación y Nuevas Tecnologies (CENT) de la Jaume I y que «se va actualizando periódicamente con nuevo material y referencias», como explica Francesc Esteve, profesor de Pedagogía y Didáctica, experto en temas de tecnología educativa y delegado de la rectora para Transformación Docente, la Comunidación y director de su gabinete.

«La UJI -señala Esteve- siempre se ha caracterizado por ser una universidad moderna y avanzada en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC); y, en este caso, desde prácticamente los inicios del boom de las IA generativas como ChatGPT hemos estado siguiendo muy de cerca el tema». «Esta guía incluye  pautas y consejos para la evaluación del estudiantado, pidiéndole al alumno, por ejemplo, que sea más específico, analizando y comparando los datos, y con puntos de vista de diferentes autores, contando el proceso, no solo el resultado», señaló el experto. 

Detectar las trampas

El documento explica que ChatGPT puede realizar tareas muy útiles para la creación de textos a partir de la información que le proporciona el usuario, pudiendo hacer un trabajo académico, por ejemplo, con datos que «no siempre son correctos, sin referencias en muchos casos, y que habrá que revisar y editar», dice. ¿Cómo detectarlo? «Ya enseñamos a usar esta herramienta y formamos al profesorado para evitar un uso fraudulento, y hay programas como Turnitin que vigilan», señala.

Un aliado si se usa bien

El ChatGPT puede, no obstante, ser un aliado si se usa bien. La UJI mira de frente a la nueva tecnología y «para 2024 se han presentado ya diferentes proyectos de innovación educativa de integración de la IA en titulaciones como Ingeniería Mecánica, Estudios Ingleses, Física, Traducción, Educación, o Administración de Empresas, entre otras», explica Esteve. 

Suscríbete para seguir leyendo