Los anónimos imprescindibles de Cevisama: "Me encanta el ambiente de la feria"

Más de 3.000 trabajadores velan en Feria Valencia para que todo funcione como un reloj en la cita

Yeray y Anaís, azafatas de Barraganes.

Yeray y Anaís, azafatas de Barraganes. / KMY ROS

Cevisama, la feria internacional de la cerámica, baño y piedra natural, cuenta con un sinfín de trabajadores que durante toda la semana lo han dado todo en jornadas maratonianas para que la feria sea un éxito organizativo. Miles de visitantes profesionales han pasado por los diferentes stands de las 500 marcas expositoras repartidas en 80.000 metros de exposición, pero siendo consciente de que los productos son los protagonistas, sin el esfuerzo de los actores secundarios de la cita en sería imposible que un evento de este volumen se desarrollara de la forma deseada.

Hablamos de montadores que desde semanas antes de la apertura de puertas trabajaron para que los stands lucieran como lucen. También de efectivos de seguridad, de miembros de la organización, camareros, cocineros, limpiadores, azafatas, técnicos... Los empleados de la feria no son los que están en un primer plano de protagonismo, pero sin ellos Cevisama no sería lo que es. 

En este artículo conversamos con varios de estos actores secundarios imprescindibles que desde hasta el viernes han recorrido palmo a palmo Feria Valencia para que todo salga a pedir de boca y tanto las marcas como los clientes se tengan que preocupar solo de exponer sus productos y conocer todas las novedades de las firmas.

Estos siete empleados ponen rostro a los aproximadamente 3.000 trabajadores que durante toda la semana se han empleado a fondo para que la feria, la más importante de todas las que se celebran en Feria Valencia cada año, luzca como siempre ha hecho. 

«Lo que más nos piden es el bocadillo de jamón y queso»

Estrella y Eros, camareros en la feria.

Estrella y Eros, camareros en la feria. / KMY ROS

Estrella y Eros nacieron respectivamente en Brasil e Ibiza. Son asiduos a las ferias como camareros y aseguran que les «encanta el ambiente porque vienen clientes de todas las nacionalidades». Preguntados por las propinas admiten que «sí dan bastante, aunque como tenemos tanto trabajo en la hora de almuerzos y comidas tenemos que servir en barra. Los hay que no lo entienden, aunque en general la gente es maja». Afirman que su plato estrella es «el bocata de jamón y queso».

«Ni cuento los kilómetros que hago cada día; acabo hecha polvo»

Isabel se encarga de que la feria esté limpia.

Isabel se encarga de que la feria esté limpia. / KMY ROS

Isabel es una asidua a las ferias como limpiadora. Asegura que «la gente es muy amable y aseada, aunque hay de todo» y destaca que Cevisama es «la feria más grande de todas las que se organizan aquí». Es por ello que cada día recorre un sinfín de kilómetros para que todo esté reluciente: «Prefiero no contar los kilómetros que hago, pero sé que acabo hecha polvo. Empiezo a las 8.00 de la mañana o antes y acabo a las 19.00, pero estoy contenta de poder trabajar estos días».

«Tenemos el guardarropa lleno, he llegado a contar 300 chaquetas»

Selena y Ana custodian chaquetas y maletas.

Selena y Ana custodian chaquetas y maletas. / KMY ROS

Selena y Ana trabajan también desde primera hora de la feria hasta el final. Una jornada por tanto de unas diez horas. Se encargan de uno de los guardarropas de Cevisama: «Se está llenando todos los días. He contado hasta 300 chaquetas y muchas maletas». Añaden las dos jóvenes que tienen clientes «de todas las nacionalidades, sobre todo americanos, pero también ingleses, mexicanos o asiáticos». En cuanto al coste de dejar la prenda, «son dos euros todo el día».

«Vienen clientes de todo el mundo, es una feria muy internacional»

Yeray y Anaís trabajan estos días como azafatas de la empresa Barraganes. Afirman que esta no es su primera feria y destacan lo siguiente: «Trabajamos de lunes a viernes de 9.00 a 19.00. Viene gente de todo el mundo y nos apañamos como podemos con los idiomas porque nos encargamos de recibir a los clientes». La presencia de las azafatas en Cevisama es muy numerosa, pues suelen trabajar como mínimo dos de ellas por firma y existen 500 marcas. «Seremos unas mil», confirman.