PROBLEMAS EN LA INDUSTRIA

Ximo Puig trata mañana con el sector las ayudas a la cerámica

La propuesta de la Generalitat pasa por ofrecer créditos bonificados para garantizar que el dinero llegue a las empresas

Interior de una fábrica cerámica de Castellón.

Interior de una fábrica cerámica de Castellón. / Mediterráneo

EFE

La reunión anunciada la semana pasada entre el president de la Generalitat, Ximo Puig, y el sector del azulejo para concretar las actuaciones de respaldo que dependen de la administración autonómica ya tiene una fecha marcada. El encuentro tendrá lugar el miércoles 22 de marzo, y el principal asunto a tratar es hallar una fórmula para ofrecer mecanismos de liquidez a la industria, muy afectada por los sobrecostes energéticos, sin las trabas que plantea la nueva ley contra la morosidad.

Tal y como ocurre con las subvenciones del Gobierno central, los empresarios temen que las firmas del sector no puedan recibir las inyecciones de dinero del Consell, debido a la nueva normativa estatal sobre periodo de pagos a proveedores. Para sortear esta barrera, Puig anunció en el inicio de la pasada edición de Cevisama que se cambiarán las subvenciones directas por una serie de préstamos del Institut Valencià de Finances (IVF) con unas condiciones ventajosas. Entre estos alicientes está la creación de un tramo del préstamo que no habrá que devolver, además de facilidades para la posterior amortización.

Necesidad de apoyo

El jefe del Consell ha indicado, en un desayuno informativo organizado por EFE en València, que la cerámica es "un sector fundamental" que ha aportado mucho a la balanza comercial del país, "y ahora necesita del apoyo del conjunto de las administraciones para transitar este itinerario tan complicado que tiene, al ser una industria tan dependiente del gas".

Ximo Puig, en un desayuno informativo, valoró la necesidad de que la cerámica tenga ayudas.

Ximo Puig, en un desayuno informativo, valoró la necesidad de que la cerámica tenga ayudas. / Manuel Bruque / EFE

Ha explicado que la Generalitat ha establecido una doble ayuda de 50 millones vía créditos y otros 50 millones de ayuda directa, pero ha señalado que estos últimos recursos están vinculados a la normativa estatal, "que no permite en estos momentos saltarse la ley de morosidad".

Insiste en una excepción a la ley de morosidad

"Estamos ante una situación excepcional y pedimos que haya una medida excepcional para que las empresas puedan tener acceso", tanto a las ayudas de la Geneneralitat como a los 400 millones previstos por el Estado, que están ligados a la ley de morosidad, lo que hace "burocráticamente muy difícil que las empresas puedan acceder".

Ha avanzado que van reconvertir las ayudas autonómicas "para que finalmente puedan llegar lo más rápidamente posible a las empresas", y ha señalado que quieren vincularlos al empleo.

"El objetivo es que través de la vía financiera fundamentalmente, con una parte no reembolsable, podamos dar al final las mismas ayudas que pensábamos desde la perspectiva de las ayudas directas y que se instrumente lo más rápidamente posible", ha manifestado.

Reducir los tiempos

Puig ha indicado que quieren que a partir de este miércoles se puedan agilizar las ayudas "para que en el menor tiempo posible todas las empresas puedan acceder a los 100 millones que va aponer la Generalitat para apoyo al sector cerámico".