La Federación de Caza plantea abatir jabalís con arco como alternativa a las jaulas
Esta modalidad cinegética «es de gran efectividad y bajo coste», según los cazadores
El alcalde de Vila-real se mostró interesado por esta técnica para frenar a los ungulados
La Federación de Caza de la Comunitat Valenciana planteará a la Conselleria de Medio Ambiente el empleo del arco para la captura de jabalís frente al uso de jaulas, como las instaladas en Orpesa para hacer frente a la superpoblación de estos animales salvajes. Esta modalidad cinegética está «en auge», aseguran, y es de «gran efectividad y bajo coste». Según la presidenta de la entidad, Lorena Martínez Frígols, la caza con arco es una alternativa «muy seria» a la trampa Pig Big Trap en zonas con restricciones a las armas de fuego.
La jaula fue homologada por el Consell cuando Transición Ecológica aún estaba en manos de Compromís, como complemento para el control de la fauna silvestre.
Galicia es una de las autonomías donde se permiten, por vía de emergencia, ambas posibilidades: la trampa jaula y el arco ante el incremento de jabalís en espacios no cinegéticos. En esa línea, Madrid también ha dado luz verde a ambas posibilidades, pese a críticas políticas y ambientalistas.
El uso de jaulas es complementario en zonas donde las armas de fuego están acotadas por razones de seguridad, aunque los cazadores ponen sus objeciones. Recuerdan que uno de sus deberes para dar cumplimiento a la ley de caza «es que los animales objeto han de ser abatidos o capturados en las condiciones menos cruentas y dolorosas posibles, dicho término queda muy lejos en aquellos animales capturados casi con cualquier tipo de caja trampa, ya que sufren un alto nivel des estrés hasta que son abatidos, en comparación con la caza tradicional».
Benlloch ya lo propuso en el mes de septiembre
Respecto al uso del arco, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, lo propuso en septiembre, como detalló este periódico, para controlar la actual sobrepoblación de ungulados que ha desatado una alarma social entre vecinos, al frecuentar espacios como el Termet.
A diferencia de localidades de su alrededor, en Vila-real no se permite cazar con rifle a estos animales, por lo que expuso esta opción para «explorar posibilidades» cara a reducir la presencia de estos mamíferos. A falta de permitir los arcos, en este municipio colocarán jaulas en zonas de titularidad del Ayuntamiento (al no contar aún con los permisos necesarios de la Confederación Hidrográfica del Júcar) y en su día se pusieron en el cauce del río Millars.
Por su parte, Orpesa ya ha colocado cercados trampa en puntos estratégicos de paso de los jabalís para minimizar su proliferación. Otras poblaciones como Peñíscola o Alcalà también han apostado por este método de control.
Benicàssim es uno de los municipios de la provincia más afectados por la plaga de jabalís, que conlleva numerosas denuncias ciudadanas ante la intranquilidad vecinal por la presencia de estos animales y el peligro de accidentes. Por ello, la localidad será la siguiente en instalar jaulas trampa para tratar de frenar la proliferación de ungulados, tras las reuniones que mantuvieron con la Conselleria de Medio Ambiente. La medida de control se aplicará en breve tras haberse completado un estudio sobre cuáles son los puntos estratégicos para colocar los cercados.
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