Representa a un gremio esencial para que las representantes festivas estén a punto en cada acto

Magdalena 2023 | Elisabeth Martínez, peluquera: "Los turnos durante las fiestas se llegan a doblar"

Los peinados de época, de castellonera y labradora centran el trabajo en estos días

Las clientas adoran a Elisabeth por su buen hacer y simpatía.

Las clientas adoran a Elisabeth por su buen hacer y simpatía. / Mediterráneo

Comenzó joven con la profesión. Es peluquera desde los 20 años y ahora en Magdalena no para. «Ya cuando iba yo a peinarme para las fiestas de la Magdalena me fijaba y me gustaba cómo lo hacía mi peluquera. Sentía curiosidad. Y cuando estudié aprendí bien, me esforcé. Quería dedicarme a ello en el día a día». Así recuerda Elisabeth Martínez Gresa (35 años), de Elisabeth Peluquería Unisex de Castelló, sus primeros contactos a la hora de peinar en estas fechas, con un extenso currículum en poner a punto a madrinas, dones de companya y Na Violant.

El trabajo fuerte en Magdalena empezó el primer viernes ya por la tarde y el sábado desde las 4.00 horas de la madrugada hasta las 24.00 o 24.30 horas del a noche. Intensivo. «Son turnos de 16 horas, el doble de una jornada normal. El lunes --ayer-- bajó un poco la faena porque están peinadas del sábado y el domingo pero ya hoy martes volvemos ya de nuevo con fuerza porque aumenta el trabajo», explica Elisabeth, ejemplo del tesón de todo un gremio durante esta intensa semana.

«Tengo entre mis clientas estos días desde damas de sector a madrinas infantiles, madrinas mayores, damas de la ciudad infantiles y mayores, y la Na Violant y de cuatro dones de companya. Sí, en el currículum he tenido otra Na Violant. i de dones otro año dos o tres», cita la joven.

«El peinado típico de labradora es el más versátil, con la opción de los ochos, cordones,...»

Investigación y creatividad

Para los peinados de época, que son diferentes a lo habitual, «puedes desarrollar más la creatividad, te basas en la historia, en los gustos de ellas, miras fotos antiguas, documentos y también si llevan algún complemento en la cabeza se mira que encaje lo mejor posible en el conjunto». Estos de época corresponderían a Na Violant y les dones. Y luego está «el de castellonera, con las ondas al agua y el moño de trenzas detrás; y el de labradora, que sí que es un poco más versátil, estirado hacia atrás con los retorcidos que se hace con ochos o cordones, hay diferentes opciones. Para el coso, para subir a la romería o en algún acto particular sí se suele llevar más el de labradora», cuenta.

Todo peinado requiere su tiempo de elaboración. Y de preparativos. Los ensayos, las llamadas pruebas, empiezan antes y se hacen varias antes del día oficial, «que suele ser para la proclamación, cuando se lucen del todo y se exhiben por primera vez». Aunque a partir de septiembre, cuando nombran a las representantes festivas, estas ya acuden a estar listas para las fotos que necesitan.

"Las clientas me cuidan mucho"

¿Y cómo sobrevive Elisabeth a estos días de tanto trabajo? «Pues bien, les xiquetes són boniques. Se lleva bien. Mira, te cuentan cosas, estás metida al final en el mundo de las fiestas y algunas son amigas», expresa. ¿Haces descanso para comer? «Sí, y si no pues alguna te dice: te he traído desayuno, te he traído almuerzo, o comida...Nos cuidan mucho, sí, Si falla la peluquera,...», sonríe con simpatía.

Los madrugones también forman parte de la jornada, pues hay clientas que tienen que estar pronto en actos y, «aunque el peinado suele aguantar bien hecho un par de días, luego ya es recomendable volverlo a hacer».