RECONTRA

Cuando no se llega a todo

Vicent García Nebot

Vicent García Nebot

Uno de los problemas que tienen los ayuntamientos de hoy en día es que no llegan a todo. Se les acumula el trabajo. Que si prestar servicios, que si solicitar subvenciones a otros organismos, que si arreglar los baches o reponer bombillas…

Pero una de las cosas fundamentales que tiene que acometer una corporación es el control de que aquellos emprendedores que quieren acometer proyectos puedan hacerlo de una manera ágil y con las menores trabas administrativas. Por ejemplo, cuando alguien quiere construir un bloque de viviendas, una gran nave industrial o un gran proyecto terciario.

Es en estos momentos cuando los ayuntamientos empiezan a ralentizarse. En primer lugar, por la complejidad del proyecto. En segundo lugar, por la carencia de medios humanos y técnicos de los ayuntamientos. En tercero, por el lógico vértigo del funcionario a equivocarse y que recaiga la responsabilidad sobre él o ella. Y muchas razones más y de lo más variadas.

El tiempo es oro

Hay ayuntamientos que acumulan expedientes de licencias de obras y de actividad hasta niveles más allá de lo admisible. No es lógico que se tarde más en dar una licencia que el tiempo que tardaría en construirse el proyecto que ampara. Y, además, el tiempo (en economía y en otros aspectos de la vida) es oro.

La solución está en la ley. Por un lado, las Entidades Colaboradoras Urbanísticas Valencianas (ECUVs) que son empresas privadas, que han sido duramente acreditadas y homologadas ante el Estado para convertirse en certificadoras de que los proyectos cumplen con la normativa urbanística y de la edificación. Y que pueden ayudar a que los plazos de obtención de licencias se reduzcan sustancialmente.

Y la herramienta VERA, que es un programa informático valenciano, público y gratuito para la verificación de proyectos antes de obtener la licencia.

Quien no los utiliza es porque no quiere o porque no sabe que existen.

Urbanista