Rifirrafe político por la subida de los sueldos del nuevo gobierno de Nules

La organización del nuevo gobierno municipal de Nules ya está aprobada. En un pleno extraordinario, la mayoría que han constituido CeN, PSOE y Més Nules no solo ha aprobado las delegaciones de cada concejal, sino también sus retribuciones, que ha supuesto una subida de sueldos que no ha pasado desapercibida.

El consistorio tendrá cuatro dedicaciones exclusivas, además de una del 77%, otra del 50% y la del alcalde, David García, al 95%, que le permitirá dar clases como ha hecho el último año de la pasada legislatura.

El equipo de gobierno tripartito contará, además, con dos cargos de confianza en funciones de secretaría, comunicación, asistencia de los concejales y protocolo.

Más de 330.000 euros al año

Los ediles con dedicación exclusiva, que percibirán una retribución anual bruta de 37.900 euros distribuidos en 14 pagas serán el de Obras y Servicios, Ramón Lucas; el de Hacienda, Guillermo Latorre; y la de Cultura, María José Esteban (los tres de CeN); y la socialista Blanca Silvestre, que asume, entre otras áreas, la de Fiestas. El edil de Urbanismo, César Estañol (CeN), cobrará 44.000 euros anuales; y el de Contratación y Personal, Adrián Sorribes (PSOE), 19.950 euros.

El alcalde cobrará 49.850 euros brutos al año en catorce pagas, mientras que los dos cargos de confianza sumarán 65.000 euros.

Estas cifras han contado con el rechazo frontal de la oposición, recién estrenada. Desde el Partido Popular han incidido en que este será «el gobierno más caro de la historia de Nules». En cuanto a Vox, han asegurado que ha sido una medida «al puro estilo bolivariano», lo que ha supuesto «triplicar el gasto en salarios». Recuerdan que en la legislatura anterior, las percepciones netas no alcanzaban los 90.000 euros anuales, y esta legislatura superan los 265.000.

El alcalde defiende la medida diciendo que «las condiciones en las que nos impusieron trabajar la pasada legislatura no tienen nombre». Advierte que «muchas cosas se escapan y muchas no se pueden controlar con tan poca gente dedicada al Ayuntamiento». Incide en que se ha aprobado «lo que creemos que es necesario para poder funcionar correctamente» y «que sea barato o caro dependerá del trabajo y de los resultados».

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