Encaran el final de las obras del Casal Jove de Nules tras 6 meses de retraso

Cuando está a punto de cumplirse un año desde el inicio de las obras del Casal Jove, el Ayuntamiento de Nules encara el remate del proyecto, con un retraso de medio año. La inversión supera el millón de euros y transformará el espacio que ocupaban el Casal Jove y la Casa de la Cultura que, a partir de su reapertura, será un complejo dinámico y polivalente, así como totalmente adaptado.

Desde el mes de enero, las calles Colón y Sant Vicent estaban parcial y totalmente cortadas al tráfico por un vallado de obra que ya ha sido retirado, el primer indicio de que el plan está casi completado. Así lo confirma el concejal de Urbanismo, César Estañol, quien concreta que «faltan algunos remates y la limpieza».

Nules invierte más de un millón de euros en el Casal Jove y la Casa de la Cultura

La culminación está tan próxima que el consistorio inicia los trámites para licitar la contratación del mobiliario y el equipamiento informático, de manera que en cuanto la constructora libere el edificio, lo puedan «vestir por dentro» y ponerlo en marcha.

Acusada demora

El plazo de ejecución de las tareas era de seis meses desde la firma del acta de replanteo, por lo que, si se tiene en cuenta que empezaron a trabajar recién estrenado el año 2023, es evidente que la intervención acumula un retraso de casi medio año. La razón tiene que ver con el sistema de climatización.

Estañol explica que en la propuesta inicial plantearon recurrir a la geotermia, como ya hicieron en su día con la piscina cubierta, «pero al final se tuvo que sustituir por otro sistema que aprovecha la aerotermia como fuente de energía renovable». Este cambio sustancial de la hoja de ruta provocó alterar plazos, pues «hubo que proponer y aprobar un modificado para concluir la obra», dice el edil.

La intención del consistorio, desde el primer momento, era garantizar un ahorro en el consumo energético de más del 70%. Esa es la razón por la que, aparte del sistema elegido para climatizar, la ejecución ha contemplado el aislamiento térmico exterior de las fachadas, además de los trasdosados interiores con aislante térmico y acústico, y el aislamiento de los falsos techos, a lo que se suman captadores fotovoltaicos, sistemas de renovación de aire con recuperación de calor, carpintería térmica, vidrios más eficientes en las ventanas, así como elementos de control de soleamiento.

Por el momento, no dan nuevos plazos, pero ya han salvado el principal escollo del proyecto.

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