Puesta a punto

Adelantándonos a la primera gran cita turística del año, desde el Ayuntamiento de Benicàssim ultimamos cada detalle en la puesta a punto de nuestra ciudad, para recibir a cientos de turistas y viajeros que, junto con nuestros residentes, están planeando ya dónde pasar en familia o entre amigos, unos días de descanso. Son muchos los que están contando los días que faltan para disfrutar esas deseadas primeras vacaciones que nos brinda el calendario para descansar del día a día desconectando de la rutina. Y es que la Semana Santa arranca la temporada y este año adelanta su celebración a finales del mes de marzo. Por ello, a las tareas de mantenimiento anual de nuestras playas hemos sumado ya las de aireado, cribado y arado de arena, para que estén en perfecto estado para recibirles.

Y es que Benicàssim cuenta con casi ocho kilómetros de playas que son nuestro principal atractivo turístico y carta de presentación de la ciudad. Un patrimonio natural que cuidamos y que cuenta con el profundo compromiso de calidad municipal, un reclamo turístico que ponemos en valor para que nuestro destino siga siendo referente y gane en competitividad, calidad y excelencia.

Las playas de Benicàssim son reconocidas y están galardonadas. Cuentan desde hace años con el aval de las máximas certificaciones de calidad de la Unión Europea como son las banderas azules, pero además están certificadas medioambientalmente por la «Q de calidad turística y la ISO 14001». Unas playas que invitan al relax, a disfrutar y sentir toda la esencia del Mediterráneo, resultando una excelente opción para quienes buscan una escapada cercana y espacios naturales adecuados, amplios y accesibles.

Nuestra estrategia turística, pasa por disponer de las mejores infraestructuras y contar con unos servicios versátiles, adaptados e integrados que faciliten el derecho a viajar de todas las personas, cumpliendo así con el denominado Código Ético Mundial para el Turismo. Y es que cada vez el turista es más consciente y está más comprometido, buscando lugares cuidados y accesibles. Destinos en los que descansar, relajarse y reconectar, pero buscando reducir al mínimo su impacto negativo sobre el territorio y decantándose por aquellos comprometidos con la conservación del entorno y la preservación de cultura, eligiendo aquellos que fomentan el crecimiento social y económico responsable.

Y es así, desde ese convencimiento, que en Benicàssim trabajamos para que quienes nos elijan y decidan visitarnos encuentren todo esto y se sorprendan con mucho más. Porque, además, contamos con otro tesoro natural, el Paraje Natural del Desert de Les Palmes, de una belleza increíble que invita a caminar y descubrir rincones excepcionales, a pedalear en plena naturaleza por las mejores sendas de montaña, o admirar un paisaje de una belleza extraordinaria que permite encontrarse con uno mismo. Un verdadero pulmón verde que nos regala la naturaleza y que perfila la inconfundible silueta que dibujan Les Agulles de Santa Àgueda.

Pero tan importante como conocer, cuidar y proteger nuestra riqueza turística, es contar con un proyecto para potenciarla y destinar recursos técnicos y económicos necesarios para mantenerla, determinando las estrategias y acciones que permitan adoptar las decisiones para alcanzar la mejora continua. Los indicadores de rendimiento como destino utilizados por el Observatorio Turístico, nos revelan una tendencia general positiva durante el año 2023 pero lo más alentador es que el sector ha experimentado en nuestra ciudad una recuperación por encima del promedio de la Comunitat Valenciana, con impacto económico directo de 64,7 millones de euros, lo que representa un incremento del 15% con respecto al año anterior.

Unos muy buenos datos, reflejo de la apuesta decidida del ayuntamiento por el turismo como sector clave en nuestra económica local y fruto del importante esfuerzo colectivo con los empresarios que, trabajando de la mano conseguimos que nuestra ciudad gane en competitividad.

*Alcaldesa de Benicàssim y senadora